ZAZPIAK BAT, UNA OPORTUNIDAD EN EUROPA
Ayer estuve en Bayona junto a Alain Lamasoure y Francois Alfonsi europarlamentarios ambos en Bruselas y el que en las próximas semanas adquirirá condición de tal Iñaki Irazabalbeitia. Vinimos hasta aquí para participar en un debate organizado por el colectivo “Autonomía Eraiki” en la universidad de Bayona.
El debate lo introdujo Eneritz Zabaleta, como estudioso de la propia universidad con una alusión a la controversia que existe ya en este momento entre el modelo que representa la Europa de los estados y el que aspira a abrirse paso, el de la Europa de las comunidades naturales o los pueblos, las realidades que por razones económicas, culturales, etc. no solo presentan una marcada identidad colectiva, sino que aportan eficiencia en términos de desarrollo al panorama europeo.
Yo no puedo estar más de acuerdo con esta forma de plantear el debate. Creo que en ese marco poner a jugar el zazpiak bat ofrece solo oportunidades. Y ello ocurre porque tenemos una serie de particularidades que nos convierten en un interesante observatorio y en un sugerente laboratorio de ideas y estrategias. Podemos demostrar lo periclitados que están los esquemas de los estados nación tradicionales, los verdaderos inventores del nacionalismo como acertadamente puntualizaba hoy uno de los organizadores del debate.
Y es que desde una perspectiva económica ofrecemos algunas características muy sugerentes. Vistos desde fuera nuestra economía es interesante. Cuando comenzó el autogobierno éramos una ruina industrial, Una de las regiones más deprimidas de Europa. Vivíamos además sacudidos por la violencia. Nos atrevimos en esas condiciones a asumir competencias plenas en materia fiscal, una facultad que conseguimos, creo yo, porque la parte estatal que negociaba pensaba que nos estaba entregando la losa, lápida y epitafio de nuestra tumba. No había mucho que recaudar en un lugar en un lugar con su sistema productivo oxidado y unos porcentajes de paro que alcanzaban el 30% en algunas zonas. Sin embargo en treinta años gracias al trabajo colectivo de una sociedad dinámica y emprendedora y un liderazgo político certero hemos pasado a ser una de las regiones más pujantes de Europa.
No es casualidad. Tenemos un modelo alternativo de gestión de lo público, lo hemos puesto en valor y hemos obtenido resultados. Ahora, desaparecida la violencia y con esa realidad plenamente visible afrontamos el futuro con otras posibilidades.
Hoy nadie negaba en Iparralde que las actuaciones de ETA han sido un obstáculo objetivo para una mejor comunicación y colaboración entre territorios hermanos. Hoy en camino de desaparecer para siempre la violencia afrontamos la posibilidad de insistir en la colaboración transfronteriza con herramientas existentes para contribuir a una evolución que como decía el ex ministro Lamassoure viene por la vía de los hechos. En efecto aunque en los tratados solo encontramos menciones a las regiones en un protocolo dedicado al principio de subsidiariedad, en la práctica la flexibilidad, la proximidad y la eficiencia van colocando las cosas en su sitio.
Me ha encantado constatar que en “el otro lado” se valora lo conseguido en este en las tres últimas décadas como un paso posibilista, tangible y decidido en materia de construcción nacional, porque ha incidido en mejorar el bienestar y las posiblidades de la sociedad que formamos y de todos sus componetes. Quizá por eso el colectivo que lucha en Francia con el jacobinismo del País Vecino habla para empezar de “construir autonomía”
Yo creo que una cooperación más intensa en el seno del tradicional Zazpiak Bat bajo la fórmula jurídica de la euroregión, con reconocimiento jurídico europeo y que se proyecta sobre aspectos concretos como la colaboración en infraestructuras, innovación, emprendimiento, etc es un buen lugar por el que comenzar. A ese movimiento quiere sumarse, por voluntad mayoritaria de su parlamento, pese a UPN, la comunidad foral de Navarra.
Desde una perspectiva económica la suma de estas tres diversidades forma un coctel que puede alcanzar el éxito. Ocupamos un lugar estratégico en la vertiente atlántica europea. Aportamos una sugerente combinación de industria internacionalizada, con una tradición innovadora y una inusual presencia de la economía social. Por otra parte tenemos una zona del territorio que ha hecho de la explotación sostenible de su medio natural una de sus señas de identidad. Tenemos una clara identidad cultural En dos de los tres territorios disponemos de una autonomía fiscal que es una experiencia bastante peculiar también en el concierto europeo. Y al menos en parte del territorio tenemos resultados, unos resultados muy llamativos, ocultos hasta ahora por la actividad violenta de ETA.
Por eso creo que internarnos de hoz y coz en esta colaboración tiene. Porque es práctico y útil para mejorar la vida de la gente, porque va a abrir oportunidades y por esa vía va a reforzar una identidad que, hoy en Europa está también vinculada a esa coherencia lógica que dan los empeños comunes.
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