Un acuerdo histórico
No esta nada mal el balance de esta primera semana después de las vacaciones. Aunque no estoy directamente implicada en las negociaciones sobre el sistema europeo de supervisión financiera me alegro mucho de que ayer finalmente se llegase a un acuerdo sobre este asunto. No voy a entrar en detalles técnicos, pero este acuerdo es una primera herramienta europea para prevenir crisis financieras como la que estamos padeciendo. Es uno de esos acuerdos que te devuelven la fe en las instituciones europeas, porque solo a este nivel son eficaces este tipo de instrumentos.
El acuerdo se ha desbloqueado porque después de cerca de treinta reuniones entre Consejo, Parlamento y Comisión, el Parlamento ha conseguido que los gobiernos de los estados (Consejo) acepten colocar como presidente del Consejo Europeo de Riesgo Sistémico, al presidente del Banco central europeo. Sé que los nombres y los conceptos son complejos y esotéricos, pero este era un asunto clave.
Por resumir os diré que este acuerdo sobre supervisión financiera va a permitir prevenir conductas financieras temerarias, va a controlar la veracidad de las contabilidades nacionales para evitar «sorpresas» como la crisis griega y en definitiva va a imponer, con la autoridad que otorga representar a los 27 estados de la unión, un rigor en el sistema financiero con posibilidades de imponerse a la dinámica de los tiburones de entidades privadas que han ocasionado la grave crisis que padecemos. Es lo que se espera de Europa y para lo que sirve la política.
Partíamos de la base de que todos los países europeos eran plenamente conscientes de que las normas y el control, ó se dictaban al menos a ese nivel ó fracasábamos todos. Sencillamente los instrumentos que cada uno podía construir por separado para enfrentarse a una crisis de dimensión mundial no iban a servir para nada. Pero en el camino ha habido que hacer frente a las desconfianzas, los egoísmos, los orgullos y hasta los cuartos oscuros de muchos estados y, por supuesto, al miedo de perder el control de los instrumentos que se iban creando. De hecho el último escollo ha sido aceptar que una autoridad no vinculada a ningún estado concreto, en este caso el Presidente del banco central europeo fuese el presidente del Consejo Europeo de riesgo sistémico. También se ha abierto el abanico en cuanto a los sectores que van a estar representados en los principales órganos decisorios de todo este sistema de control. Así, habrá especialistas académicos, representantes de la pequeña y mediana empresa etc. El acuerdo ha sido subrayado además con una declaración conjunta de los coordinadores de los principales grupos parlamentarios en favor de una supervisión de nivel europeo para todas las infraestructuras de mercado compartidas.
Nosotros, en EAJ-PNV hemos sido siempre europeistas convencidos y estamos en esto desde el principio. El proyecto europeo nació y caló en la ciudadanía porque europeas y europeos vieron en él una herramienta eficaz para prevenir nuevas guerras y un instrumento de progreso económico y social, en definitiva creyeron en la utilidad de Europa. Este acuerdo nos devuelve esa ilusión, porque sin él estábamos inermes ante la especulación y los negocios financieros sin escrúpulos. Ahora tenemos alguna oportunidad.
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Egun on Izaskun !!!!
Para comenzar todo un detalle por parte de Andrej, habra que esperar el gota a gota hasta donde llega…espero que lejos y luego desemboque en Euskadi.
Que complicado eso que llaman politica, en este caso a el acuerdo historico que dices, un monton de reuniones desconfianzas,egoismos,orgullo parece una pelicula, pero ¿se hubiera podido evitar esta crisis ???. Preguntas y te responden que ni los mejores analistas financieros del mundo podian saber la repercusion. Espero que no se repita !!!!
Musus Izaskun